Uno de los misterios insondables del
Cristianismo es el de la PREDESTINACION.
Santo Tomas, como San Agustín, la define como el plan que
la providencia divina determina desde toda la eternidad, facilitando los medios
eficaces que atraerán a unos hombres hacia la gloria.
¿Cómo
conciliar la predestinación con la voluntad salvífica universal? ¡Misterio ¡
Misterio que sólo puede ser vencido por la Fe. La unión inefable de esos
valores permite la manifestación tanta de la MISERICORDIA, cuanta de la
JUSTICIA de Dios, es decir perdonando o castigando. Porque Dios, <<nunca
manda algo imposible>>. Sin duda la predestinación a la gloria es
superior a la predestinación a la gracia .Y
los méritos de los elegidos NO son causa de su predestinación sino efecto de ésta...Pero
es la gracia gratuita la que impulsa a
la salvación. Los hombres recibimos una suerte de oferta pero no siempre la atendemos.
Y aunque no hay predestinados al mal porque Dios quiere la salvación de todos
¿No es verdad que <<ninguno sería mejor que otro si Dios no lo hubiese
amado y ayudado más? Se pregunta el Sol de las Escuelas (Iq20, a3)>>
Las escrituras fundamentan la predestinación. <<Quien es el que
le dio a Él primero alguna cosa, para que pretenda ser por ello
recompensado?>> (Rom XI,33). Se repiten así las admoniciones del bellísimo
pasaje de JOB, que se compendian en un ¿Tu que sabes? << ¿Pretendes tú
acaso invalidar, mi juicio y condenarme a Mi por justificarte a ti mismo? >>
Job 41,2 << ¿Quién puso en el corazón
del hombre la sabiduría? ¿Dónde estabas cuando se formó en masa el polvo de la tierra y se endurecieron sus terrones? ¿Quién
podrá explicar la disposición de los
cielos? 38; 36, 37,38.No, Job y el hombre no pueden responder porque nos rodea
el misterio. Pero la fe salva, con las obras, y ella es un preciado don de
Dios.
La predestinación absoluta en Calvino margina el misterio, peca de
soberbia bajo la influencia del judaísmo, niega la voluntad salvífica universal y
el libre albedrio y con porfía satánica pretende manifestarse en la
<<recompensa económica>> En última instancia el <<capitalismo
salvaje>> sería una obra salvífica por la voluntad de Dios. Por su parte
Jansenius también rechaza la libertad y se aproxima a Calvino pretendiendo que
la redención sólo beneficia a los elegidos. Pero el problema viene de lejos,
cuando Pelagio hacia problemática la gracia de Dios, bastando entonces la
naturaleza humana. Los tres están condenados por la Iglesia.
DIOS PREDESTINO LA GLORIA DE LOS QUE SE
SALVARÁN Y SU MISERICORDIA PRECEDE AL BUEN MÉRITO, PERO A NADIE PREDESTINÓ AL
MAL, ASI COMO NADIE SE SALVA CONTRA SU PROPIA VOLUNTAD (Denz Índice IX ,d)
FUENTE: PARTE DE GUERRA, JULIO VARGAS PRADA.
N* 166, XI, 1998.
PÁGS: 310 – 311.
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